La gama de opciones de almacenamiento disponibles hoy en día es extensa, y la mejor opción de sistema de almacenamiento para diferentes tipos de elementos puede depender de un gran número de factores.
Para aquellos que no tienen experiencia y conocimiento de las operaciones de almacén, estos factores pueden ser difíciles de entender. Pero hay al menos tres cosas principales que rigen la elección de los sistemas de almacenamiento utilizados en un almacén.
La gama de mercancías
¿Cuántos tipos diferentes de elementos hay en un almacén? La gama puede consistir en un gran número de artículos diferentes, o apenas algunos en grandes cantidades.
Este factor influye en gran medida en el diseño del almacén, es posible que sea necesario recoger los productos de forma distinta, ya que pueden ser de diferentes tamaños o embalados de forma diferente.
Por ejemplo, un almacén para una compañía de productos deportivos probablemente tendrá una amplia gama de artículos en su inventario. Un almacén en frío para la industria cárnica, por otra parte, puede ser llenado en su mayoría con recipientes de carne similares. Los sistemas de almacenamiento principales en cada uno pueden ser diferentes para adaptarse a la gama de mercancías.
Algunos gerentes ven buenos resultados al organizar su almacén de mercancías en estanterías, ahorrando espacio y aumentando la eficiencia del almacén. El objetivo es siempre crear un flujo de mercancías eficiente, y por lo tanto, siempre se deben tener en cuenta las diferentes características de cada producto.
Frecuencia de la demanda y el acceso
Incluso si un almacén contiene una pequeña gama de productos, los niveles de demanda para cada tipo de artículo, o la frecuencia con la que se tiene que acceder, rara vez son los mismos. Los niveles de demanda tienen un gran impacto en la elección de sistemas de almacenamiento en diferentes áreas del almacén.
Siempre es bueno recordar la regla 80/20 – en muchos almacenes, el 80% de los trabajos de manejo se enfoca en sólo el 20% de la gama de productos. Además, la recolección es típicamente la parte más costosa de mano de obra de una cadena de suministro. Es por eso que es tan importante hacer la recolección más fácil y más eficiente al almacenar los artículos de la manera correcta, por lo general, se recomienda mantener los artículos menos utilizados lejos de la zona de despacho y los más vendidos cerca.
Tasa de rotación
Si el objetivo es crear un flujo de transporte de productos, el diseño del almacén debe estar guiado en parte por la tasa de rotación.
Un almacén que guarda alimentos perecederos probablemente tendrá mayor movimiento, mientras que en un almacén de documentos puede ser menor. Ambos funcionan de manera diferente, y probablemente utilizarán diferentes sistemas de almacenamiento.
El principio aquí es el mismo que con los otros factores, si hay una alta tasa de rotación, el almacén debe permitir la rápida y fácil recuperación y sustitución de las mercancías. En un almacén con poco movimiento, la velocidad y la facilidad de acceso pueden no ser la mayor prioridad.
